AMIGOS MIOS:

No intentéis ser el gran amor de vuestras vidas

ese que te exige, te demanda y luego te olvida

Simplemente ser los que disfrutáis

cada instante, cada segundo de vuestra compañía.

Ser los que en aquella noche

 

bajo un cielo repleto de estrellas

encontrasteis, en un abrazo, en un beso…

la felicidad que creíais perdida.

No queráis ser dueño, ni pastor, ni guía

ese que te dice lo que tienes que hacer y luego 

te margina.

Simplemente intentar ser quien te quiere y te mima,

quien en aquella madrugada de desvelo,

¡¡¡¡¡¡¡felices, extasiados, intensamente!!!!!!!! disfrutasteis

de la paz de un rostro mientras dormíais.

No valláis de visita por vuestras vidas

siendo el gran señor o señora que te llena de cosas por fuera y por dentro te vacía.

Solo debéis ser quien provoque una sonrisa

quien, un día poniéndose romántico,

enmarcó la belleza de un rostro

y escribió una dulce poesía.

No me gustaría veros suplicar amor

lastimando con una fuerte obsesión.

Solamente deseo veros como os conocí: radiantes y 

siempre felices.

Impregnados de una impensada y casual noche.

Y que por primera vez

fuisteis dueños de la confianza,

protagonistas sin ninguna restricción

de la completa entrega a la pasión

Solo intento DECIROS: 

que quizás exista el amor eterno

que tal vez la felicidad tenga dueño,

que cada instante compartido

puede ser un mágico sueño

del que no se quiere despertar…

Solo pretendo que seáis vosotros mismos

¡¡¡¡ unos locos de AMOR !!!!

El poeta que se anima a decir

sin miedos todo lo que siente…

¡Amaros intensamente

como ayer, como hoy,

como siempre!